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FISAN

Sabor tradicional de la alta gastronomía desde 1920

La tradición chacinera

El orgullo de la empresa familiar es que cada relevo generacional respete a la anterior generación introduciendo y adecuando la empresa a los nuevos retos de la sociedad. Precisamente este es el lema que FISAN lleva a cabo en su trabajo diario.

Hoy en día, la tercera generación de la familia lidera la empresa, desarrollando un proyecto cuya máxima es entregar un producto cada día de más alta calidad.

FISAN es un siglo de respeto a la tradición, a la cultura de sus productos ibéricos y de mejora cada día a través de la innovación.

El trabajo de cada temporada en FISAN comienza a cientos de kilómetros de las instalaciones que FISAN posée en Guijuelo, en las dehesas del suroeste de la Península Ibérica. Este trabajo es clave para el resultado final seleccionando la genética y morfología de las piaras que supondrán la materia prima de la campaña; y asegurando las condiciones óptimas de su crianza.

La cercanía de Guijuelo a la sierra aseguran las mejores condiciones climatológicas para la elaboración del jamón de bellota ibérico en nuestros secaderos.

Desde las instalaciones iniciales hasta la actual planta de FISAN en Campillo de Salvatierra (Guijuelo) median décadas de esfuerzo e inversión para conseguir unas instalaciones modernas y modélicas. Aún así, se conserva parte del encanto original de este tipo de instalaciones manteniendo la apertura y cierre manual de las ventanas encaradas a la sierra. Así se atesoran en todas las épocas del año las privilegiadas condiciones climatológicas que ofrece Guijuelo.

FISAN forma parte del C.R.D.O. Guijuelo desde su fundación. A través de dicha entidad, no solo se consiguió elevar los estándares de calidad de los productos ibéricos de Guijuelo a un gran nivel, si no extender la imagen y el prestigio de los productos producidos en la zona en todo el territorio nacional. Y posteriormente a nivel internacional.

Desde su sede en Guijuelo, FISAN tiene presencia en restaurantes y tiendas gourmet de los cinco continentes, donde sigue reivindicando el potencial del jamón de bellota. Un producto cada vez más apreciado en todo el mundo.